Tras las pasadas elecciones del Partido Revolucionario Dominicano, donde sus principales autoridad lograron reelegirse y mantienen la unidad en el congreso y los ayuntamientos, sin rivalidades con coherencia en el manejo de las políticas públicas y partidaria, les prepara una futura victoria.
Estar en el poder le permite al PRM conquistar dirigentes de otros partidos en mayor proporción que los que han salido de la organización.



